Hasta ahora se había detectado en el país la subvariante BA.4, que también es motivo de consulta en todo el mundo porque son las dos que están propiciando nuevas hospitalizaciones. Hasta el momento no hay detalles de la persona que dio positivo con BA.5, pero sí se apunta que tiene como antecedente un viaje internacional.
El último reporte de vigilancia del Instituto ANLIS/Malbrán para la semana del 5 al 11 de junioinforma que «la situación de variantes del coronavirus SARS-CoV-2 en Argentina se caracteriza actualmente por una circulación exclusiva de la variante Ómicron».
Además, se precisa que «la proporción de variante Ómicron en casos sin antecedente de viaje internacional ni relacionados con la importación se sitúa en un 100%, según la información registrada».
El avance de BA.4 y BA.5 sobre la subvariante BA.2 -que predominó en el mundo entre enero y abril- muestra que ya a fines de mayo, la segunda prevalecía en Portugal. Para fines de junio, BA.4 y BA.5 juntos se habían convertido en variantes dominantes en el Reino Unido y Alemania.
Estas subvariantes BA.4 y BA.5 de ómicron parecen no tener resistencia de los anticuerpos tanto entre las personas que han tenido una infección previa por covid-19 como entre las que se han vacunado completamente, según nuevos datos de investigadores del Centro Médico Beth Israel Deaconess, de la Facultad de Medicina de Harvard.
«Observamos reducciones de 3 veces en los títulos de anticuerpos neutralizantes inducidos por la vacunación y la infección contra BA.4 y BA.5 en comparación con BA.1 y BA.2, que ya son sustancialmente más bajos que las variantes originales de covid-19», explicó a la CNN el médico Dan Barouch, director del Centro de Investigación de Virología y Vacunas del Centro Médico Beth Israel Deaconess de Boston.
Para Barouch, «nuestros datos sugieren que estas nuevas subvariantes de ómicron probablemente podrán provocar oleadas de infecciones en poblaciones con altos niveles de inmunidad a la vacuna, así como de inmunidad natural a BA.1 y BA.2». Pero también señaló que «es probable que la inmunidad de la vacuna siga proporcionando una protección sustancial contra la enfermedad grave por BA.4 y BA.5».