El besugo colorado está presente todo el año, pero en esta época se destaca por la mayor cantidad.
Las salidas embarcadas en el mar, para muchos, son exclusivas del verano. En plenas vacaciones familiares destinan una jornada y contratan uno de los tantos servicios que tenemos en la costa para dar con una abundante variedad de peces, ya sea a pocos metros de la costa o embarcándose en búsqueda de las grandes especies de piedra. Pero para otros, el gusto de realizar esta modalidad en el agua salada se extiende a todo el año, buscando alternativas para disfrutar de la misma aún en los meses más fríos.
Allí en Claromecó están los amigos de Audaz, donde Juan Dibbern es el capitán de una lancha para seis pescadores que sale desde el balneario todo el año, y quien, semanalmente, nos mantiene informados de cómo viene la pesca en la zona. Nos contaba que en esta época la gran atracción son los besugos colorados, una especie que abunda y permite que en las distintas salidas se saquen más de 2 cajones de pescado por persona. No siempre hubo este ejemplar en la zona, apareció hace pocos años y ahora es opción para la pesca deportiva, pero, también para la artesanal.
Mezclados con esta especie que se destaca en cantidad y calidad, comiendo pejerrey están las anchoas a pleno, otra especie para aprovechar en este momento junto a las pescadillas, prácticamente las tres variedades que conforman la variada de invierno que, a partir de julio, tendrá como estrella principal al mero, iniciando la temporada de piedra, donde este pez y el salmón son los imanes de los pescadores.
El agua salada es opción todo el año, con distintas especies y buenos servicios pensando en embarcarse. Sólo hay que coordinar los días más agradables e ir por una experiencia inolvidable y asegurarnos unos buenos kilos de pescado para las próximas ideas gastronómicas, en familia, o con amigos.
- Excursiones de pesca en Claromecó, Audaz. Tel.: (02983) 445335. En redes, Instagram.
Fuente: Revista Weekend