22 noviembre, 2024 00:16
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Se acentúa la concentración en las exportaciones del agro

Las exportaciones de granos y subproductos de Argentina muestran desde hace décadas una alta concentración con apenas cinco empresas que explican más del 60% de los envíos, según los datos oficiales de la Secretaría de Agricultura respecto a los embarques de granos en 2022. Más concretamente, cuatro firmas de bandera norteamericana y la china Cofco pican en punta, pero a partir de la fusión de dos grandes como lo son Bunge y Viterra este segmento quedará todavía en menos manos.

Según las proyecciones, esta nueva compañía lideraría localmente las exportaciones de aceite de girasol con alrededor del 60% del total, las de aceite y harina de soja con alrededor del 31% y las de granos como trigo, cebada y soja, con el 20%, 17% y 25% respectivamente.

En el ranking nacional de exportaciones de granos, durante 2022 Bunge se posicionó cuarta con el 10% del total, lo que representa unas de 6,1 millones de toneladas, detrás de las también norteamericanas ADM, Cargill y de la china Cofco. En paralelo, un dato para nada menor es que Viterra, hasta el momento de capitales canadienses pero con respaldo de la suiza Glencore, desde hace varios años es líder indiscutida en las exportaciones de subproductos de soja y aceites porque básicamente absorbió el grueso de los clientes a partir de la caída en desgracia de Vicentín, quien también es su socia en la planta de molienda y biodiesel Renova.

De cualquier manera de aquí en adelante a partir de la fusión de dos gigantes como lo son Bunge y Viterra, la primera lectura es que las empresas norteamericanas serán definitivamente las líderes indiscutidas en el negocio de exportación de granos de Argentina que en la práctica es el que más divisas aporta al país con alrededor de u$s40.000 millones durante el año pasado.

Tiempo atrás la China Cofco se había posicionado como primera en los envíos de granos sin procesar pero a partir de 2020 le cedió su lugar a la norteamericana Cargill. Por su parte, en el segmento de los aceites y subproductos hasta 2020 Viterra peleaba cuerpo a cuerpo con Vicentín, de capitales nacionales, pero lo cierto es que con el default de la segunda, la canadiense terminó por absorber gran parte de su operatoria e incluso su capacidad de molienda ya que con contratos a fasón mantiene activa parte de sus plantas. En este negocio bastante atrás aparecen firmas locales como Aceitera General Deheza (AGD) o Molinos Agro, el brazo agroindustrial de la familia Pérez Companc.

En este contexto desde la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia de Argentina por el momento no recibieron una comunicación formal respecto a la fusión, pero lo cierto es que las empresas tienen una semana desde el cierre del pacto para hacerlo. De cualquier manera, según indicaron, se pondrá bajo estudio el caso para determinar los alcances de la fusión. Por estas horas se especula con la posibilidad de que localmente la nueva empresa deba desinvertir en algunos activos para no ejercer monopolio, más que nada en el segmento de los subproductos.

Según los términos del acuerdo, que fue aprobado por unanimidad por las juntas directivas de Bunge y Viterra, los accionistas de Viterra recibirían aproximadamente 65,6 millones de acciones de Bunge, con un valor total de aproximadamente u$s6.200 millones y aproximadamente u$s2.000 millones en efectivo, representando una combinación de consideración de aproximadamente 75% de acciones de Bunge y 25% en efectivo.

Según el comunicado, como parte de la transacción, Bunge asumirá u$s9.800 millones de deuda de Viterra, que está asociada con aproximadamente u$s9.000 millones de inventarios fácilmente negociables de alta liquidez. Se espera que la fusión se cierre a mediados de 2024.

 

Fuente: Ambito

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