Por Yanina Otero
Las exportaciones de granos y subproductos de Argentina muestran desde hace décadas una alta concentración con apenas cinco empresas que explican más del 60% de los envíos, según los datos oficiales de la Secretaría de Agricultura respecto a los embarques de granos en 2022. Más concretamente, cuatro firmas de bandera norteamericana y la china Cofco pican en punta, pero a partir de la fusión de dos grandes como lo son Bunge y Viterra este segmento quedará todavía en menos manos.
Según las proyecciones, esta nueva compañía lideraría localmente las exportaciones de aceite de girasol con alrededor del 60% del total, las de aceite y harina de soja con alrededor del 31% y las de granos como trigo, cebada y soja, con el 20%, 17% y 25% respectivamente.
En este contexto desde la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia de Argentina por el momento no recibieron una comunicación formal respecto a la fusión, pero lo cierto es que las empresas tienen una semana desde el cierre del pacto para hacerlo. De cualquier manera, según indicaron, se pondrá bajo estudio el caso para determinar los alcances de la fusión. Por estas horas se especula con la posibilidad de que localmente la nueva empresa deba desinvertir en algunos activos para no ejercer monopolio, más que nada en el segmento de los subproductos.
Según los términos del acuerdo, que fue aprobado por unanimidad por las juntas directivas de Bunge y Viterra, los accionistas de Viterra recibirían aproximadamente 65,6 millones de acciones de Bunge, con un valor total de aproximadamente u$s6.200 millones y aproximadamente u$s2.000 millones en efectivo, representando una combinación de consideración de aproximadamente 75% de acciones de Bunge y 25% en efectivo.
Según el comunicado, como parte de la transacción, Bunge asumirá u$s9.800 millones de deuda de Viterra, que está asociada con aproximadamente u$s9.000 millones de inventarios fácilmente negociables de alta liquidez. Se espera que la fusión se cierre a mediados de 2024.
Fuente: Ambito