Protesta de la UTEP «por una Navidad sin hambre». (Foto: captura TN)
Los piqueteros vuelven a la calle tras la cadena nacional por el primer año del gobierno de Javier Milei. Bajo la consigna “Navidad sin hambre”, tres de las principales organizaciones sociales -Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), Territorios en Lucha y Frente de Lucha Piquetero- se movilizan este miércoles con más de 500 protestas en todo el país en reclamo de ayuda alimentaria y un bono de fin de año.
La conducción de la organización señaló que “en un marco de unidad exigiremos a los sectores privados y públicos una respuesta urgente para afrontar esta Navidad con un mínimo de dignidad”.
En la Ciudad de Buenos Aires, el punto central de la protesta se ubica frente al Hotel Sheraton, en el barrio de Retiro. Allí, las mujeres que sostienen los comedores y merenderos comunitarios llevan ollas vacías para hacer visible la “gravísima situación que se atraviesa en los barrios por la caída de los ingresos y la destrucción de las políticas de apoyo a la economía popular llevada adelante por el gobierno de Milei”.
Temprano por la mañana, la Policía de la Ciudad desplegó un operativo con camiones hidrantes frente al hotel, donde ya esperaban apostados sobre la plaza grupos con banderas de Barrios de Pie, MST, MTR y el Polo Obrero.
El martes por la noche, durante la cadena nacional por el primer año de su gobierno, Milei resaltó la caída en la cantidad de piquetes a partir de la gestión de Patricia Bullrich al frente del ministerio de Seguridad.
“Hace exactamente un año, tener las calles de nuestras ciudades secuestradas por los piquetes era la norma. Imagínense que en 2023 hubo más de 8000 piquetes, un promedio de 32 piquetes por día hábil a lo largo y ancho del país. Hoy, los piqueteros tienen miedo de tomar la calle, y la gente puede circular tranquila, y con razón, porque para nosotros el orden público es sagrado”, dijo el Presidente.
Sumó, sobre los cambios en el otorgamiento de la ayuda social: “Esto también sucedió porque, hace un año, teníamos un sistema de representación forzada mediante el cual el Estado obligaba a los más vulnerables a depender de distintos gerentes de la pobreza que los forzaban a asistir a piquetes para cobrar su plan. Hoy, toda ayuda social se asigna de forma directa a los beneficiarios, sin intermediarios”.
La ofensiva oficial contra los piqueteros también se expande a lo judicial: en al menos una causa se obtuvieron pruebas para procesar y enviar a juicio oral al líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, a quien se lo acusa por los presuntos delitos de “administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública, amenazas coactivas y extorsión”.
Fuente: TN