Santiago Bausili, presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA)
La comitiva que viajó a China encabezada por la canciller Diana Mondino y tutelada por el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, concedió más de lo que obtuvo. El gobierno argentino tuvo que aceptar la internacionalización de la moneda de una «dictadura comunista» y reconocerla como medio de pago para el comercio exterior. Una mancha para la dolarización y el culto a la hegemonía norteamericana.
La ministra de Relaciones Exteriores Diana Mondino en China
«En la reunión con el presidente del Banco Popular de China, Pan Gongsheng, Diana Mondino y Santaigo Bausili dialogaron sobre la relación histórica entre ambos Bancos Centrales, iniciada con la firma del primer swap hace 25 años; el compromiso de la Argentina en la internacionalización del remimbi (yuan convertible) como moneda para la liquidación del comercio; la identificación de áreas técnicas para completar las revisiones contempladas bajo el acuerdo del swap; y los acuerdos de cooperación e intercambio de experiencias técnicas y regulatorias», afirmaron a LPO fuentes de la cancillería.
En tanto desde el Palacio de Hacienda se excusaron: «Cuando tengamos algo, lo vamos a publicar. Solo comunicamos cuando se resuelve algo y con el visto bueno de China».
De la comunicación oficial de cancillería se desprende que el cronograma del swap corre según los tiempos previstos. En este caso Argentina debe afrontar el pago de USD 5.000 millones en junio. De no suceder, China puede activar la cláusula de default cruzado, y hacer caer todos los acuerdos preexistentes con los organismos multilaterales de crédito. De desencadenarse está dramática situación, Argentina se caería del mapa del mercado financiero sin chance alguna de financiamiento por un largo tiempo.
Sobre la postura del gobierno de Xi Jinping, más sinceros estuvieron algunos de los empresarios que acompañaron la comitiva «Ninguna expectativa de nada» sentenció uno de los consultados. Otros fueron mucho mas pesimistas «China amenaza con cortar las exportaciones de carne a mitad de año».
En rigor fue Diana Mondino quien retomó la confrontación con China en una explosiva entrevista concedida en Japón, histórico rival geopolítico de la potencia asiática, hace poco mas de un mes. La canciller argentina dijo que el gobierno de Javier Milei reducirá el comercio con el gigante asiático «solo a la compra y venta de empresas privadas a empresas chinas» y planteó: «El gobierno argentino no debe interferir como en el pasado con el gobierno anterior decidiendo a quién comprar, qué comprar, a qué precio».
A las claras la gira por el gigante asiático se dio en un clima de malestar creciente. En la víspera del encuentro entre los representantes de los bancos centrales, el diputado libertario Jose Luis Espert se reunió con la representante de Taiwán y agravó la tensión con China. «Se están tirando un tiro en el pie con una escopeta», aseguró a LPO una fuente con estrecha relación con el gobierno de Xi.
Fuente: LPO (Luciana Glezer)